domingo, 9 de diciembre de 2012

TRADICIONES NAVIDEÑAS:

Es innegable que, por muchas razones que podemos esgrimir, todos, de cualquier edad, esperamos participar y convivir con nuestra familia y las personas que amamos en una época que esperamos con ansia en el transcurso de cada año: Las fiestas de Navidad y Fin de Año. Cada País, cada comunidad, dentro de cada religión y aún, dentro de las mismas familias, dependiendo de su origen y de su historia, contamos con una tradición especial que deseamos seguir y respetar; es claro que en no pocas ocasiones, esas tradiciones de que hablamos se han deteriorado y hasta se han perdido al pasar los años; otras se conservan incólumes y otras mas, se han mixtificado. En Huehuetenango, las fiestas navideñas tienen su arranque el día 7 de Diciembre, cuando a partir de las seis de la tarde, se produce la cohetería en honor de la Virgen de Concepción, patrona de la ciudad, que es una de esas tradiciones que han venido a menos. Hace años, cuando todavía no nos habían invadido las distintas y variadas confesiones religiosas derivadas del protestantismo, la gran mayoría de huehuetecos pertenecía a la Iglesia Católica y como la cohetería nació dentro de esa religión, era espectacular el evento maravilloso de los cohetes de luces y de mortero que surcaban el cielo; es cierto, éramos menos, pero de cada domicilio surgían las líneas luminosas de los cohetes que se dirigían hacia arriba y que se percibían muy bien porque oscurecía muy temprano, en estos que son los días mas cortos del año; éramos menos, pero los cohetes se contaban por miles. Los jefes de familia, algunos, encargaban, con sus coheteros conocidos y preferidos, la media o una docena de los famosos cohetes de vara; otros se dirigían a lo que es ahora la 3ª calle, en donde, desde hace tantos años que se pierden en la memoria, comenzaron a colocarse la ventas navideñas, principalmente con los juegos pirotécnicos. Esas ventas, también se convirtieron, al paso del tiempo, en una tradición. Hasta ahora, hemos podido convivir con ellas; que yo recuerde, desde que era niño, siempre las ví en el mismo lugar de ahora. Como otras tradiciones, aunque no sean precisamente navideñas, tendrán que modificarse porque el número creciente de población y de vehículos, exige que muchas cosas cambien para facilitar la vida de los ciudadanos. La cohetería del 7 de Diciembre de este año, no fue ni la sombra de la que se producía antaño; tradición que, ha diferencia de la “quema del diablo”, nos distinguió como la ciudad mas culta de Guatemala y que nos hizo lucir, en todo su esplendor, el título de “La Tacita de Plata del Occidente del País”. Pero así y todo, tenemos que preparar el espíritu y sacrificar el amor a lo que un día nos identificó como excelentes ciudadanos, para darle paso, talvez no a la modernidad, pero sí a un cambio en muchos aspectos que es absolutamente necesario para adaptarnos a lo que ahora exigen las leyes inmutables a la protección del medio ambiente, la preservación del centro histórico de la ciudad y principalmente al urgente deseo de pretender vivir en paz y solidariamente, en una ciudad que ha crecido enorme y desorganizadamente y en donde la creatividad y el respeto al derecho de los demás debe privar, para que no explotemos de una forma aciaga y podamos seguir tranquilos, en esta que sigue siendo, la HERMOSA CIUDAD DE HUEHUETENANGO. ¡Feliz Navidad y excelente Año Nuevo!

0 comentarios:

Publicar un comentario

Envíenos sus comentarios. Los comentarios que contengan expresiones soeces o fuera de lugar serán eliminados por nuestro equipo de moderación. Rogamos incluir su nombre y correo electrónico.

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio