INSEGURIDAD

“La violencia se combate con inteligencia”, tal la expresión que se divulgó en el proceso de campaña presidencial en la última “gesta” política del País, siendo esta la respuesta del partido, ahora gobernante, frente a su mas cercano contendiente que ofrecía “mano dura” para combatirla.
La frase seguramente sedujo a mas de uno pero todos, esperanzados, aunque no nos tiñéramos con el color verde, deseábamos que apareciera la susodicha inteligencia para que la inseguridad desapareciera de los escenarios del País; y aunque la esperanza es lo último que muere, agoniza la ilusión después de dos años y meses en que “la materia gris” no se ve por ninguna parte en el combate a la violencia generalizada.
Mucho se ha especulado con relación a lo que se viene haciendo desde las alturas para ofrecer un panorama distinto en este aspecto, con el propósito de tranquilizar a la población que exige resultados: Se afirma que de pronto aparece un “plan de limpieza” que consiste en el aniquilamiento de ciertos delincuentes para evitar llevarlos a la cárcel y que salgan de ahí tan rápido como que un Juez los libere por “falta de mérito” o “por falta de pruebas”. Se habla de que algunos comisarios “contratan” a una “mara” para que hagan perversidades en su demarcación y luego, cuando se termina el período contratado, estos vuelven a su jurisdicción y el Jefe se da “el tupé” de que sus acciones terminaron con los delincuentes que azolaban el lugar; pero las ganancias de las “operaciones” se repartieron “equitativamente” y “santos en paz”. Pero “el contrato” queda abierto para una próxima oportunidad. Y hay otras “lindezas” que se saben y se cuentan...
Lo cierto es que aquí, seguimos viviendo en medio de robos, asaltos, secuestros, extorsiones, amenazas y asesinatos; se anuncian, con bombos y platillos, planes de seguridad cuyos resultados jamás se dan a conocer, porque creo que tienen un poco de vergüenza porque los resultados son negativos; nada mejora, nada se arregla, la delincuencia sigue campante, sentando sus reales por doquier, a ciencia y paciencia o con la complicidad de quienes deben combatirla.
Esta semana aquí en la ciudad, no terminamos de alarmarnos por tanto suceso trágico: Personas muy jóvenes baleadas en lugares céntricos de la cabecera y un conocido comerciante cuyo cadáver ha sido encontrado en las proximidades de una cancha de fútbol, no son sino la punta del iceberg en cuyo interior perviven historias macabras que marcan nuestro triste devenir; “La delincuencia, a pesar del gobierno, denota mas inteligencia” parecieran gritar desde el mas allá, quienes han sido muertos en estos dos trágicos años.
Los vivos, principalmente quienes asumieron responsabilidad en este sentido, debieran “sacar la casta” para demostrar que sí tienen capacidad para parar este “desmadre”.