NOTAS CORTAS

El domingo anterior recorrió algunas calles de la ciudad el desfile de Carrozas con el que culminaron este tipo de actividades que se realizan con anterioridad el desarrollo de las Fiestas Julias; participaron como siempre, carrozas institucionales, empresariales, del sector educativo en sus diferentes niveles y las oficiales. Llamó la atención que la carroza de la Reina la haya elaborado la institución que la postuló (la 5ª. Brigada de Infantería) y no la Comisión Municipal respectiva que, por tradición y obligación, siempre se esmeró en presentar algo valioso. Por lo demás sobresalió la creatividad y belleza de algunas de las participantes.
Este sábado, precisamente cuando estamos concluyendo el presente boletín, bajo una pertinaz lluvia, se ha efectuado el desfile hípico con la participación, según informaciones de los organizadores, de 290 ejemplares de ganado caballar procedente de casi todos los Departamentos de la República que quisieron exhibir caballos peruanos, españoles, criollos y de un cuarto de milla; entre estos fueron muy aplaudidos los pequeños “pony” que siempre gustan mucho a los asistentes que, mojados y todo, aplaudieron y admiraron a los hermosos ejemplares. Por la lluvia no dejaron de haber resbalones de los animales (los herrajes no ofrecen seguridad en pavimento mojado) y los consiguientes golpes sufridos por los jinetes; el estado del tiempo impidió una mas brillante exhibición de las destrezas de animales y jinetes.
Durante las últimas semanas se han escuchado con mayor intensidad las protestas de propios y extraños, propietarios y conductores de vehículos, quienes sufren asiduamente los problemas que les causan los enormes túmulos que están situados en jurisdicción del municipio de Malacatancito, sobre la carretera interamericana; la verdad es que se han constituido como verdaderos obstáculos para la libre locomoción lo que los hace totalmente ilegales; todos opinamos que las autoridades a quienes corresponde el asunto debieran actuar estrictamente apegados a la ley, no solo en Malacatancito, sino en todos aquellos lugares en donde esta ilegalidad perniciosa y dañina, esté presente.