domingo, 6 de junio de 2010

MAGISTERIO EN ACCIÓN

Huehuetenango ha sido uno de los departamentos de la República menos afectados por las copiosas lluvias que nos dejó la tormenta Ágata; Cuilco resultó afectado, por enésima vez, por el desbordamiento de los ríos Cuilco y Sosí principalmente; algunas comunidades del municipio de Aguacatán también sufrieron algunos desastres; la cabecera departamental de Huehuetenango, resultó con daños de alguna cuantía pero en general solo habría que lamentar daños en infraestructura particular y oficial; daños personales en cuanto a pérdidas de vidas directas por la tormenta, nos parece que no hay; algunas personas se ahogaron porque fueron arrastradas por los ríos crecidos, pero eso hay que abonarlo a otra cuenta “roja”.
Pero ante la determinación muy cuestionable de las autoridades centrales sobre suspender clases en los establecimientos públicos y privados, por una semana, a nivel nacional, los maestros de Huehuetenango y de todo el País (me imagino), decidieron organizarse por sectores, para solicitar la ayuda de la población en general, a efecto de reunir víveres, ropa, medicinas, agua embotellada, frazadas y demás elementos indispensables para cubrir necesidades insatisfechas de la población afectada por el fenómeno natural.
A diferencia de otros grupos que señalaron un punto de acopio, el Magisterio Huehueteco visitó a los posibles donantes para no ocasionarles el menor tipo de molestias de manera que colaboraran eficazmente y lograron un gran éxito. Los vecinos aportaron con gusto y en la medida de sus posibilidades. La mayoría de los grupos magisteriales decidieron los lugares que ellos consideraron que debían ser atendidos con prontitud y llevaron la ayuda a su destino, utilizando sus propios recursos y en algunos casos, solicitando transporte oficial.
La ayuda del pueblo huehueteco ha ido en primer lugar a solventar necesidades de los albergues municipales de nuestro Departamento; pero fundamentalmente se ha encaminado allá a los lugares de Guatemala que mas lo necesitan; en este sentido jamás se pensó en discriminar ni privilegiar el apoyo, con el pensamiento puesto en que todos somos guatemaltecos y debemos ser tratados por igual, principalmente en casos como este.
Felicitaciones al pueblo huehueteco que una vez mas, ha respondido a este tipo de requerimiento humanitario y nuestro reconocimiento al Magisterio por su gran actitud de apoyo a quienes mas lo necesitan en este momento.
No se necesitó, porque no se vio, ni se escuchó (probablemente porque hizo mutis por el foro), al “flamante” representante del Presidente de la República en Huehuetenango, el Gobernador Departamental, de quien, “ni sus escasas luces”... Estos son precisamente los adminículos ornamentales absolutamente innecesarios que, en vez de ayudar, simplemente estorban.

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