NUEVA OPORTUNIDAD:

¿Con que intenciones recibimos las nuevas oportunidades que Dios nos da? ¿Con el deseo y el entusiasmo que significan? O con la mala intención de ni siquiera tomarlas en cuenta…

            Este nuevo año que ya comenzó su andadura, es una sucesión de oportunidades (porque sencillamente no es solo una) que El Señor nos otorga, para que las aprovechemos. Es cosa nuestra entonces obtener el mejor de los resultados con cada cosa que emprendamos; entiendo que cuesta mucho empezar a trabajar para conseguir los resultados que deseamos, pero, luego de la planificación adecuada, tenemos que “ponernos las pilas” para trabajar duro en cada una de las etapas que debemos cumplir; la vista fija en el éxito, la energía, el entusiasmo y la perseverancia, nos llevarán a puerto seguro.

            Huehuetenango necesita este año de sus mejores ciudadanos para seguir avanzando por el camino correcto; para ello cada quien debe trabajar en lo suyo y triunfar porque la suma de metas conseguidas nos hará cada día mejores y mas grandes en lo individual, familiar y también en el colectivo; mientras mas ciudadanos trabajen en lo que les corresponde con las mejores intenciones de lograr su finalidad, mas prósperos seremos como comunidad.

            Sabemos que quienes se han venido preparando para “asaltar” el poder a través de  la conducción del gobierno central, el congreso de la República y las municipalidades mediante una campaña política que hace rato comenzó, nos harán la vida imposible por las múltiples y repetidas mentiras y los engaños de siempre (es un hecho que todos ellos son iguales, unos peores que otros); pero quienes trabajamos y nos ganamos la vida ejerciendo la actividad que podemos y sabemos hacer, haremos caso omiso de la suciedad política que nos quieran endilgar y sabremos seguir adelante a pesar de los obstáculos que ellos nos presenten.

            Por esa “campaña politiquera” cada vez mas contaminada por la desmedida ambición de quienes han vivido y siguen viviendo metidos de cabeza en los llamados partidos políticos (que no son mas que agrupaciones que se forman alrededor de un sujeto con dinero-que quiere mas-o que tiene la capacidad de captar dinero de los financistas (o sea otro grupo de oportunistas) y que atrae a muchos zánganos y parásitos que ven la oportunidad de su vida para enriquecerse ilícitamente y que son capaces de ejecutar lo que les ordene la cúpula que, supuestamente, en caso de ganar, les darán una buena porción del pastel. Pues todos estos, nos seguirán haciendo la vida a cuadritos con el propósito de engañarnos de nuevo; ofrecerán cualquier cosa que se les ocurra, hasta lo mas estúpido e inverosímil, utilizando el tiempo que, en los medios de comunicación les regalarán ahora y que nosotros, con nuestros impuestos, pagaremos. También, supuestamente, los financiaremos, ahora con $.4.00 por voto recibido. La pregunta es, ¿Por qué además de soportar sus sandeces, les tenemos que pagar su propaganda y cuatro dólares por voto que reciban? ¿Qué beneficio obtiene el pueblo de Guatemala de “estos”?

            No cabe duda, en el negocio al cual se metieron, jamás perderán; ellos siempre ganan y se enriquecen ilícitamente aunque la victoria en las urnas no les sonría; los guatemaltecos de la llanura siempre perdemos con esta plaga que debiera erradicarse total y definitivamente.

            Pero nosotros, quienes trabajamos de verdad, tenemos la decisión final y el juicio en contra de los corruptos en nuestras manos; utilicemos ese poder democrático con cordura e inteligencia y hagamos lo que nos corresponde.