CORRECCIONES
Sobre las enormes deficiencias, errores y falencias de todo tipo, algunas de las cuales hemos señalado al principio, también podemos aportar algunas sugerencias a efecto de que, al tomarse en cuenta, pudiéramos iniciar el camino de la recuperación total o parcial de todo eso que nos ha convertido en una de las cabeceras departamentales de Guatemala mas deficientes y atrasadas.
Esta última expresión, por supuesto que dolerá a quienes mas aman a esta tierra, pero es que en un estudio comparativo imparcial y objetivo el resultado que se obtiene, es el señalado.
Pero, bien, entremos a sugerir algunas cosas que pudieran ayudar principalmente en los aspectos descritos en el primer artículo de el presente semanario.
1.- Ventas callejeras: Tal como afirmamos, el comercio informal no solo invadió vías importantes de la ciudad sino que eliminó las aceras del centro, afectando a automovilistas, peatones y empresarios con negocios establecidos; parece ser que es gente privilegiada ante los munícipes que, probablemente, cobran buen dinero por permitir ese desmadre. Deben eliminarlos de las vías públicas para siempre ofreciéndoles lugares apropiados, después de un censo que deje establecido quienes de verdad solo viven de eso; el “mercadito” y el “Gran Parqueo”, así como el llamado “campo de la feria” pueden ser muy buenas opciones. El estacionamiento mencionado es grande y ellos mismos pueden pagar el alquiler.
2.- Congestionamiento vehicular: Huehuetenango se construyó sin pensar en el avance tecnológico del futuro; por algo don Adalberto Herrera Castillo, escritor y poeta huehueteco, la nominó poética pero objetivamente, como “la ciudad de los cien topes”. Por lo tanto, para evitar el caos vehicular permanente, las autoridades de tránsito, sean quienes fueren, deben establecer horarios estrictos para el ingreso de vehículos pesados de todo tipo, incluyendo las vetustas camionetas de servicio urbano cuya circulación debe prohibirse entre las siete de la mañana y las siete de la noche. Furgones, camiones distribuidores, recolectores de basura, etc. deben hacer su trabajo en horarios de la madrugada y de la noche. Esta sugerencia forma parte de una solución integral.
3.- PMT: Conforme lo que hemos visto, los agentes de la PMT están muy bien entrenados pero solo para emitir remisiones, principalmente a motoristas, por supuestas infracciones de todo tipo. Pero para lo concerniente y fundamental del ordenamiento vehicular les falta muuuuuuucho. Para que dejen de presentar la imagen de un cuerpo represivo al servicio de determinados personajes, deben ser conveniente y adecuadamente entrenados el tiempo que sea necesario (por supuesto, totalmente concentrados); de manera que cuando salgan de nuevo a la calle puedan ser respetados por su preparación, inteligencia y sentido común. Hoy por hoy, no están nada bien.
Faltan algunos casos puntuales que tratar y que han sido mencionados en el primer artículo de esta semana; trataremos de aportar algo para corregirlos. Pero para salir al paso de lo negativo que mencionamos y de otros muchos aspectos, se necesita, además de preparación y planificación, un par de “pantalones” bien puestos y justamente en su lugar que, seguramente, allanarán el camino del desarrollo.
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