SUSPENSIÓN DE ENERGÍA:

El Instituto Nacional de Energía Eléctrica, ente generador del fluido para muchos departamentos del País, tomó la decisión de suspender el servicio que nos presta, a partir del domingo 15 de Mayo de las 11 de la noche a las 6 de la mañana del lunes 16.
La suspensión dejó sin energía a todo el Departamento de Huehuetenango e incluyó lugares de El Quiché, Quezaltenango y demás; se había anunciado para una semana antes pero por razones que ignoramos el corte ya no se efectuó.
Debemos afirmar que circularon anuncios por la prensa escrita y por algunos medios radiales en ambos casos, lo que puso sobre-aviso a las personas que se enteraron de la determinación y como siempre, también hubo un fuerte grupo de personas que ni leyeron ni escucharon nada.
Hasta aquí todo bien; pero quienes estaban mas “ojo al Cristo” de determinaciones como la aquí apuntada fueron precisamente los delincuentes agrupados en bandas criminales que solo esperan que las oportunidades se las sirvan en bandeja de plata para actuar. De esa cuenta, los asaltos proliferaron en el departamento de Huehuetenango en donde ingresaron de mil maneras distintas a negocios establecidos cuyos empleados o propietarios se llevaron la desagradable sorpresa de que les habían vaciado sus empresas cuando acudieron a abrir puertas de negocios el lunes por la mañana.
Los informes oficiales y no oficiales que nos han hecho llegar en el curso de la semana que está por terminar de lo ocurrido en esas siete horas de suspensión de energía eléctrica, son verdaderamente alarmantes y preocupantes. Parece mentira, pero las pérdidas que los asaltos ocasionaron se cuentan por millones de quetzales que simplemente cambiaron de manos con una tranquilidad apabullante.
Las autoridades, sabidas de la suspensión nocturna, no tomaron ninguna medida de prevención; no se desplazaron unidades motorizadas ni mucho menos personal para cubrir las empresas en donde su mueven artículos llamativos para los ladrones porque son fáciles de movilizar y porque su precio es alto. ¿Qué mas querían? “En arca abierta el justo peca” y ellos se despacharon con la cuchara grande ante la falta de vigilancia policial y probablemente ante la facilidad que los mismos empresarios les dieron porque, por ignorancia o negligencia, no tomaron tampoco las medidas precautorias que un apagón nocturno requiere.
Con la proliferación de los medios de comunicación, para que todos nos enteremos, el INDE o cualquiera otra institución o empresa, debiera utilizarlos todos para avisos tan importantes como este; eso resulta ser imposible y un trabajo como este, además de ser vital y por demás imprescindible, no es conveniente hacerlo por la noche; tendrá que ser diurno por muy afectadas que salgan ciertas instituciones. Aquí es obvio que el trabajo no era ni vital ni imprescindible porque no tuvieron empacho en retrasarlo una semana.
El INDE por cuestiones lógicas en las que mucho tiene que ver la inseguridad y la impunidad en la cual vivimos, no puede darse el lujo de suspender el fluido eléctrico para trabajar en la noche; es como abrirle las puertas de par en par a la masa delincuencial que poco falta para que nos tenga de rodillas. Si el gobierno cumpliera con su deber constitucional otro gallo nos cantaría, pero es bien sabido que eso no es así.
¡Señores del INDE!, ¡Por favor! No atenten de esa mala manera, en contra de la seguridad de personas y bienes; medidas como suspender la energía por la noche parece que se tomaran por petición especial de la delincuencia que nos agobia.