FRÍO

Tal es el clima que actualmente estamos viviendo en el Departamento de Huehuetenango; las temperaturas han bajado a niveles a los que no habíamos llegado en los meses y días anteriores. Hasta podría asegurar que se pierde en el tiempo y en la memoria la última vez que sufrimos este helado ambiente.
El resultado es que, no obstante que todos nos abrigamos lo mejor que podemos, las enfermedades del aparato respiratorio no se han hecho esperar y una buena cantidad de personas, principalmente entre los adultos mayores y los niños, sufren porque la gripe (a) hace estragos en la presencia y el carácter de quienes la padecen, agobiándolos con su enojosa estadía de varios días; es una visita que no es bienvenida para nadie pero que se debe soportar en situación de descanso para evitar males mayores.
Los hospitales públicos y privados, así como los Centros de Salud, se han llenado pidiendo la atención debida para un tratamiento adecuado que permita neutralizar la enfermedad; caso contrario, quienes la padecen, se arriesgan a que se vaya convirtiendo en una pulmonía o una neumonía cuyo control ya es mucho mas complicado.
Quienes se encargan de la prevención de este tipo de problemas, habrán divulgado puntualmente la información precisa, de suerte que todos estemos bien informados y precavidos. Si no lo han hecho será porque no tienen el apoyo y los insumos necesarios para cumplir con su deber; será porque los millonarios recursos con que cuenta el Gobierno para publicidad se están empleando en otros asuntos, ojalá tan importantes como la salud del pueblo, que en este preciso momento, no requieren de la atención que debe ser enfocada a la prevención sanitaria, para beneficio de una población que tanto necesita de ayuda gubernamental en este sentido.
Se habla mucho, eso sí, de la gratuidad de la educación y de la atención igualmente gratuita en los hospitales y centro de salud, pero nosotros si tenemos nuestras dudas en este aspecto.
Resulta que a consecuencia de un accidente de tránsito, una persona de muy escasos recursos, hubo de ser llevada al Hospital Nacional para su atención; presentaba, entre otras cosas, una delicada fractura en una de sus extremidades; el procedimiento diagnosticado incluía la operación respectiva para la cual se necesitaba de un “clavo” específico, me imagino, para fortificar el procedimiento. Pero el dichoso “clavo” no formó parte de la publicitada atención hospitalaria gratuita; la familia tuvo que correr para adquirirlo en el lugar indicado por los médicos hospitalarios; y el costo del “clavo” fue de mas de Q.6,000.00 lo que echa por tierra la famosa campaña de “cero costos” en la atención de los hospitales públicos. Esto significa un “clavo” para el Ministerio de Salud.
En cuanto a la gratuidad de la educación, concepto que aparece desde hace muchos años en la Constitución Política de la República de Guatemala y que se ha publicitado con asiduidad esta vez, también se escuchan las quejas y denuncias de maestros y padres de familia que, no ven por donde, puedan cumplirse todos los compromisos de pago de insumos y servicios de los diferentes centros educativos en donde sin ambages, los padres de familia colaboraron desde siempre. Nunca fue obligación o imposición ni menos condición para recibir a sus hijos.
Por eso el frío del ambiente no solo “aprieta” en el cuerpo sino constituye un frío mas intenso en el alma de la gente mas pobre y necesitada que se percata que “el León no es como lo pintan”.