COMUNIDAD Y DIPUTADOS MIRSA ARREAGA Y RODERICO MARTINEZ GESTIONAN PUENTE BAYLEY ANTE OPOSICION DE ALCALDE DE HUEHUETENANGO

En la vida existen cosas que se deben puntualizar por lo trascendental, históricamente hablando, y por las consecuencias que se derivan de cómo es que se dan para daño o beneficio de cierto número de personas.
El Puente de Jumaj, que es el que comunica las zonas del norte de la cabecera municipal con todas las que quedan hacia el Sur, Sureste y Suroeste del municipio, colapsó, como todos sabemos, a consecuencia de la falta de atención y mantenimiento por parte de las instituciones a quienes corresponde el asunto (Lo mismo va a ocurrir, si no ponen atención, con los puentes de Minerva, los de La Viña, el puente Sacumá, el de Las Culebras, el de Canshac, etc., que ocasionarían los mismos o peores problemas); esto ocurrió hace alrededor de un año.
Los trabajos para habilitarlo de nuevo no llevaron la secuencia lógica y necesaria para realizar algo que, además de positivo, fuese práctico y útil; nunca se puso de manifiesto el interés de esa gran colectividad que había quedado prácticamente aislada y mas bien se antepusieron otro tipo de intereses probablemente mezquinos y alejados diametralmente de lo que urgía en ese momento: Neutralizar el aislamiento de miles de vecinos.
Con la mira distorsionada se comenzaron los trabajos, diz que de reparación, pero, con instrucciones precisas o no, se utilizaron recursos humanos, maquinaria, materiales y recursos económicos, hasta por casi Q.900,000.00 que, al final de cuentas, no sirvieron sino simplemente para levantar falsas expectativas entre esas miles de personas que, en el momento de la entrega e inauguración de dichos trabajos, no pudieron menos que darle gracias a Dios y a las autoridades, por haber concluido, aparentemente, con la pena y los sinsabores que, durante meses, habían tenido que sufrir por haberse cerrado el paso por esa vía.
En aquel momento, ni siquiera al mas pesimista de los mortales, menos a los “mal pensados”, se les hubiera ocurrido pensar o decir que “el alegrón”, únicamente les duraría veintidós días.
Lo cierto es que el puente colapsó de nuevo y a nadie le interesó que se dijeran miles de cosas pretendiendo justificar lo injustificable porque obviamente los vecinos afectados, habían quedado peor que la primera vez que el puente se cerró. Pero Dios “aprieta pero no ahorca” y además todos sabemos que “no hay mal que por bien no venga”.
A partir de ahí, la conformación del Comité de Emergencia del sector adquirió como que mas responsabilidad y principió a trabajar con mayor intensidad y sin importarles la oposición de autoridades bien conocidas, insistieron en la consecución de un puente tipo “Bayley” que, con sus gestiones y el apoyo de los diputados Mirsa Arreaga y Roderico Martinez, llegó a Huehuetenango el 26 de Septiembre y estuvo colocado y funcionando para el lunes 29 del mismo mes. Es, lógicamente, un puente provisional y estará colocado ahí, mientras alguna autoridad decide trabajar en el puente colapsado. Dios me de licencia para ver quien lo hace y a que costo.
Este sábado sería la inauguración oficial y no sería raro que algún político trasnochado quisiera presumir con sombrero ajeno; parece ser que se ha pospuesto dicho acto para perfeccionar una rampa; en este boletín quedará estampada la historia que hace feliz a miles de ciudadanos y avergüenza y avergonzará a unos cuantos carentes de visión y de olfato político... y de todo.
Reiteramos nuestra felicitación al Comité de Emergencia de la Zona 6 que se ha constituido en un grupo ejemplar para la comunidad, porque sin el apoyo que buscaron y que les fue denegado, no sucumbieron; mas bien la oposición les sirvió de acicate para conseguir su noble propósito y beneficiar a una gran comunidad. ¡Enhorabuena!