lunes, 13 de diciembre de 2010

ASESINATO DE SOCIÓLOGA:

En una semana tan violenta como otras, Huehuetenango surge de nuevo como protagonista de la nota roja a nivel nacional e internacional: Sujetos desconocidos secuestran en la zona 3 de la ciudad a la Socióloga, colaboradora de CEDFOG (Centro de Documentación de la frontera Occidental de Guatemala) Emilia Margarita Quan Stackman y al piloto de la institución que conducía un vehículo tipo camioneta agrícola; a este último lo abandonan amordazado y atado y posteriormente matan a golpes a Emilia y la dejan tirada en una zona boscosa de la aldea de Chiabal en el municipio de Todos Santos Cuchumatán.
Despreciable la actitud de los sicarios que ya no respetan ni tienen la mínima consideración para nadie y que se ocupan de lavar los trapos sucios de quienes podrían haberles pagado por un “trabajito” mas. Los sentimientos de repudio y de rechazo ante este vil asesinato, afloran y se generalizan por el País y en el extranjero y que pone de nuevo sus ojos en la pobre actuación del Ministerio de Gobernación que, no obstante lo que ocurre permanentemente, aún se atreve a afirmar que los índices de violencia en Guatemala han disminuido (¿?¿?¿?).
Pero ¿Por qué han arremetido en distintas ocasiones contra colaboradores de CEDFOG y esta vez asesinaron brutalmente a la distinguida Socióloga? No podemos menos que pensar en una de las investigaciones de la institución que, de inmediato, fue descalificada por parte interesada.
Nos referimos a lo que ellos descubrieron en la distribución del dinero (que no inversión) en algunas obras aprobadas y auspiciadas por el Consejo Departamental de Desarrollo de Huehuetenango en donde las anomalías saltan a la vista: Puertas con valor real de Q.400.00 presupuestadas en Q.4,200.00; ventanas grandes que valen en el mercado Q.850.00 presupuestadas en Q.1,600.00; ventanas pequeñas con costo en el mercado de Q.450.00 que ellos han pagado en Q.2,800.00 c/u; estos pequeños datos solo para demostrar la sobre-valoración de algunas de las obras aprobadas fraudulentamente por parte del consejo y que suman noventa y nueve millones de quetzales, según la auditoría practicada por CEDFOG.
Con este ejercicio han puesto de manifiesto la enorme corrupción que ha existido y en la cual participa no solo el CODEDE sino una serie de las llamadas “constructoras” que encontraron la “dolce farniente” en la repartición altamente sospechosa de los fondos provenientes del estado para construir obras con una serie de deficiencias estructurales que han saltado a la vista.
“Caminando hacia la transparencia” se denomina este trabajo de auditoría de CEDFOG que, obviamente levantó malestar, principalmente entre los integrantes involucrados del COCODE, pero en especial, entre los representantes de las ONGs señaladas, que son varias las que despiertan sospechas, y entre los propietarios de las constructoras que quedan muy mal parados porque las anomalías en las que incurrieron, unas y otras, nos muestran una corrupción de altísimo nivel.
Talvez este sea el momento preciso para traer a colación la auditoría efectuada por CEDFOG y pedir a las instancias investigativas que tienen bajo su responsabilidad esclarecer totalmente el asesinato de la socióloga, en el sentido de que “no queden cabos sueltos”, que se profundice en todas las hipótesis que salgan a colación, que si es necesario, lleguen hasta el fondo de esta “cloaca”, hasta saber, con una investigación seria y científica, quien ordenó la muerte de Emilia Quan para que le caiga todo el peso de la ley.

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