NOCTURNAL EQUINO:

Hace mucho tiempo que estamos convencidos que, a pesar de que contamos con un apoyo popular manifestado por distintos medios en lo tocante a señalar actitudes negativas por parte de las autoridades y, en la mayoría de los casos, hemos sugerido una o mas soluciones para evitar molestias por parte de la población y que tengamos una vida de mayor calidad, nadie escucha, todos se hacen de la vista gorda y de los oídos sordos, precisamente porque se manejan tantos intereses particulares, generalmente económicos en esas decisiones que juzgamos equivocadas, pero que para los responsables representan ingresos nada despreciables.
Aunque nos cueste aceptarlo llegamos al convencimiento de que, como afirmó Simón Bolívar, “estamos arando en el mar” o lo que es lo mismo, el clamor que se origina en la mente y el corazón de todo un pueblo no son mas que voces y gritos en el desierto.
Por tanto, ya no quisiéramos seguir escribiendo sobre el evidente deterioro de las calles y avenidas de la ciudad en donde la único apreciable es la ampliación de hoyos y agujeros de una gran diversidad de formas y tamaños; del infernal caos vehicular que tenemos que vivir todos los días con el agravante de que ahora ni siquiera las vías son respetadas por conductores desesperados por llegar a tiempo a su destino; de tragantes tapados y sucios que provocan grandes ríos en época de lluvia; de la proliferación exagerada de las ventas callejeras cuyos propietarios ya lo son también de las principales vías de la ciudad; de la escasez y falta de cloración del agua entubada; de la apropiación indebida de terrenos por parte de autoridades municipales que se distinguen por abuso de autoridad; de los altísimos niveles de corrupción con que se manejan asuntos públicos, etc., etc., etc.
Del destrozo del Parque Central de Huehuetenango (QEP) y de la ampliación del ”trabajo” (lo peor que nos pudo suceder) a las calles adyacentes, sobre todo ahora que ya vimos como va a quedar (a pesar de las pulidoras que no van ni siquiera a “maquillar” el trabajo y los materiales deficientes), solo quisiéramos agregar que parte del pueblo ya lo llama “la plaza de bestias”; y anoche (sábado 7 de Mayo a las 19.50 horas) un jinete, montado en su “brioso corcel” se dio “el lujo” de “dar la vuelta” en el parque o como se llame, tal como lo hacíamos antes en las noches de concierto. Jamás, en los ciento cincuenta años que llevo de vida, había sido testigo de algo semejante; las calles cercanas han servido para eso y mucho mas; el jinete de anoche, a sabiendas que las herraduras de su caballo jamás van a resbalar en la piedra colocada como piso ahí, tan burda y de tan mala calidad, simplemente guió al animal para que subiera al parque y se anotara en los anales de Huehue. que seguramente ha sido el primer caballo con su jinete que da “un colazo” ahí, en un lugar que solo estaba reservado para personas.
Y por supuesto que no lo culpo; los verdaderamente responsables son aquellos a quienes Uds. conocen tan bien.
¿Qué haya alguien con poder de decisión que intervenga para parar este “desmadre” eso…está en la cola de un venado?